Muchas teorías sobre conspiraciones para
controlar al mundo involucran a los masones como individuos o a la masonería
como organización internacional que ejerce un supuesto mandato vertical sobre
millones de adeptos a lo largo y ancho del mundo. Estas fabulas deleitan a
interesados e incautos y son útiles para engordar, con buenas monedas, los
bolsillos de manipuladores.
Poco se dice de la presencia de masones en
organizaciones de carácter benéfico, fraterno, que promueven los Derechos
Humanos o la Paz. Eso no da espectáculo y concita poca curiosidad.
Una de las instituciones donde actuaron los
masones en su fundación y organización internacional fue la Cruz Roja.
Henry Dunant (1828-1910) fue un banquero
suizo, masón, filántropo, idealista y humanitario, miembro de la Respetable Logia
Concorde de Ginebra (Suiza). Circunstancias le llevan a evidenciar la violenta
lucha ocurrida en la Batalla de Solferino entre el ejército de la alianza de
Francia e Italia, contra la armada Austriaca (Prusianos), por la independencia
de Italia, que sumaron en escazas 16 horas, 40,000 bajas entre muertos y
heridos. Miles de los heridos fallecían porque la sanidad militar era casi
inexistente.
Dunant organizó grupos de civiles con el fin
de prestar asistencia a los soldados heridos, mutilados y enfermos. A pesar de
la escasez de recursos, impulsó el levantar hospitales de campaña los que
atendían a los heridos sin importar al bando al que pertenecieran. El lema en
los hospitales era: Tutti fratelli, todos
somos hermanos, acuñado por las mujeres que colaboraban en tan noble misión. Llegó
a lograr la libertad de médicos hechos prisioneros para que atendiesen a los
heridos.
En 1862 escribió un libro con sus
experiencias intitulado Un Souvenir de
Solferino.
Dunant comenzó a difundir su idea de
organizar una institución que atendiese a los heridos en las guerras. El 9 de
febrero de 1863 Gustave Moynier,l presidente de la Sociedad Ginebrina para el
Bienestar Público, planteo el tema en el seno de la Sociedad. Cabe destacar que
muchos masones pertenecían a la precitada institución. De la reunión salieron
un grupo de recomendaciones, entre otras de de constituir un comité de cinco
personas para investigar más la posibilidad de llevar a cabo la idea, e
hicieron de Dunant uno de sus miembros. Los otros fueron Moynier, el general
del ejército suizo Henri Dufour, y los médicos Louis Appia y Théodore Maunoir.
Su primera reunión, el 17 de febrero de 1863 se considera hoy en día la fecha
de fundación del Comité Internacional de la Cruz Roja.
Allí comenzó esta organización filantrópica
que se encuentra presente en la mayoría de los países del mundo bien como la
Cruz Roja Internacional, Media Luna Roja u otro nombre.
Henri Dunant, como miembro de la
francmasonería, hizo un llamado a todos los masones del mundo para difundir la
Cruz Roja, por lo cual llegaría su mensaje a muchos países de América, África y
Asia.
En 1901 Dunant recibió el Premio Nobel de la
Paz por su papel en la fundación del Movimiento Internacional de la Cruz Roja. Lo
recibió conjuntamente con el pacifista francés Frédéric Passy, fundador de la
Liga de la Paz y activo con Dunant en la Alianza por el Orden y la
Civilización.
Dos datos curiosos: nuestro personaje inventó
el actual Botiquín de Primeros Auxilios. El otro, el 24 de junio se celebra el
Día Internacional del Socorrista, coincidiendo con el Día del Masón.
Es importante señalar que la masonería más
que una institución filantrópica, es un método de trabajo que cultiva la filantropía
como espontánea manifestación de la fraternidad. La Beneficencia se practica de
forma anónima, secreta y espontánea, pero sus resultados se ven.
Foto: Retrato de Henry Dunant, realizado a
mediados de la década de 1850.
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