“Como nuestra alma que es aire, mantiene unidos
nuestros miembros, así también la respiración y el aire abarcan a todo el
cosmos.” Para Anaxímenes el aire es la primera causa y la primera sustancia
de todas las cosas, las cuales no son más que modificaciones y transformaciones
de esta sustancia, ora se trate de una substancia aérea sui generis, ora
se trate del aire común o atmosférico, cosa difícil de averiguar con certeza,
como bien apunta Zeferino González.
Plantea
la rarefacción y la condensación como los procesos que determinan
la transformación de las cosas.
La condensación produce el frió, la rarefacción el
calor. El aire se transforma en fuego al enardecerse, al condensarse se hace
viento, después nube y, volviéndose a condensar, agua, tierra y luego piedra.
Cree en un devenir cíclico del mundo, dándose una
disolución periódica en el principio originario y su periódica regeneración a
partir del mismo.
El medico cretense Diógenes de Apolonia
vivió después de Anaxímenes, reconociendo o afirmando, como éste, que el aire
es la causa y substancia primera y universal de las cosas. Fue contemporáneo de
Anaxágoras y aquí la importancia ya que según Aristóteles, Anaxágoras concibe
el nous (1) como origen del universo y causa de la
existencia, pero a la vez trata de explicarse y llama a encontrar las cosas
cotidianas de lo que ocurre en el mundo. Por otro lado, hizo formar parte de su
explicación de la realidad al concepto de nous, inteligencia, la
cual, siendo un «fluido» extremadamente sutil, se filtra por entre los
recovecos de la materia, a la que anima con su movimiento. El nous
penetra algunas cosas y otras no, con lo que se explica, siguiendo a
Anaxágoras, la existencia de objetos animados e inertes. Platón en el Fedón
se muestra de acuerdo con la afirmación según la cual el nous es la
causa de todo y conduce al orden y la armonía, pero discrepa con la búsqueda de
las causas materiales emprendida por Anaxágoras.
Su doctrina del nous fue más tarde adoptada
críticamente por Aristóteles. Las diferencias entre las concepciones de uno y
otro pueden apreciarse con este ejemplo: Para Anaxágoras los humanos pudieron
hacerse inteligentes debido a que tenían manos, en cambio para Aristóteles el
hombre recibió manos debido a que tenía inteligencia.(2)
Sobre esa base es que Diógenes de Apolonia
considera que el aire es increado, luminoso, inteligente, lo ordena y domina
todo.
Notas:
(1) Nous.- En la filosofía griega hay dos líneas de interpretación de esta palabra:
una recoge el sentido originario del término Noûs como facultad de
reconocimiento inmediato, directo, de una realidad, y otra lo identifica con la
mente suprema o Dios. Aristóteles es el más claro representante de la primera
línea al defender la distinción entre el pensamiento noético o comprensión
directa de los primeros principios del conocimiento, y el pensamiento
dianoético o discursivo basado en el razonamiento a partir de dichos
principios. Por el contrario, Anaxágoras defiende la segunda línea (Noûs como
mente ordenadora). Anaxágoras consideró que existe una realidad inmaterial
dotada de conocimiento y voluntad que dirige el comportamiento de todas las
cosas naturales y que en cierto modo se puede identificar con Dios. Este punto
de vista introduce explicaciones finalistas del cambio natural. La tradición
filosófica recogió la idea (pero no el término Noûs) de un ser supremo que
ordena y dirige el mundo en función de un plan, y la encontramos en Platón,
Aristóteles y todo el pensamiento cristiano.
http://www.e-torredebabel.com/Historia-de-la-filosofia/Filosofiagriega/Presocraticos/Nous.htm
(2) http://es.wikipedia.org/wiki/Anax%C3%A1goras
Bibliografía:
*- Abbagnano, Nicolas. Historia de la Filosofía. 2da
edición. Montaner y Simon, S.A. Barcelona, España 1964
*- González, Zeferino (1831-1894) Historia de la
Filosofía.
http://www.filosofia.org/zgo/hf2/index.htm
*- Kranz, Walter. Historia de la Filosofia Griega.
Tomo I. 4ta edición. 1ra en español. UTEHA. México . 1962
No hay comentarios:
Publicar un comentario